La normativa vigente (VER NOTA AEMPS) establece que, cuando no existan medicamentos veterinarios autorizados para una enfermedad, el veterinario podrá, de forma excepcional y bajo su responsabilidad personal directa, para evitar sufrimientos inaceptables al animal, el uso de otros medicamentos o preparados "en cascada", tal y como se describe en una guía elaborada por la Federación Veterinaria Europea (VER), que pude resultar de gran utilidad para los veterinarios clínicos.
En ella, se establece la forma de determinar cuál debe ser el medicamento o preparado que debe prescribirse en cada caso, así como las precauciones específicas que deben contemplarse cuando se trata de animales de abasto, de animales de compañía o de équidos de no abasto, en virtud de la posible inclusión o no de la carne o productos procedentes de estos animales en la cadena alimentaria.
